Las auditorías internas realizadas al consorcio del Palacio de la Música que llegaron al tripartito desde 2004 advertían de anomalías financieras graves en la gestión de la entidad, integrada por las administraciones públicas y dirigida por Fèlix Millet, al igual que los informes recibidos anteriormente por CiU.Según ha publicado El País este martes, el Departamento de Economía y Hacienda detectó salidas de dinero sin justificación y facturas por trabajos que no fueron contratados. Aun así, el dictamen de los auditores siempre fue favorable, salvo en los informes realizados en 2003 y 2004 (correspondientes a los ejercicios 2002 y 2003, respectivamente).
En cualquier caso, los auditores realizaron numerosas recomendaciones para subsanar las anomalías del consorcio, sobre todo en 2002 y 2003 (17 cada año), y en 2004 (21). Las sugerencias fueron disminuyendo hasta las seis de 2007.
info: vozbcn
No hay comentarios:
Publicar un comentario